Hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe.
Sabemos
que debemos hacer bien y orar los unos por los otros pero ¿Qué pasa cuando
oramos?, ¿qué pasa cuando obedecemos e intercedemos por nuestros hermanos?
Primero,
tenemos una comunión con Dios, una platica donde nosotros podemos pedir lo que
nosotros queramos “Pedid y se os dará, buscad y hallaréis”, y cuando nos
acercamos con fe a Él, abre las ventanas de los cielos para escuchar nuestro
clamor, para interceder por nosotros ante El Padre a nuestro favor.
Nunca
subestimes el fuerte peso que tiene una oración para nuestro prójimo y cuánto
más que se nos encomienda que: “según tengamos
oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe”
qué mejor bien podemos hacer a nuestra familia de la fe que orar por ellos, por
sus necesidades, aflicciones, familia, proyectos, etc… y qué mejor satisfacción
que formar parte de la respuesta de Dios al interceder por ellos.
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
Templo Cristiano Eben-ezerebenezertemplocristiano2009@gmail.com
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