Hermanos, hoy en día es muy necesario que oremos unos a otros como pueblo de Dios, intercedamos por cada miembro de la iglesia, unos son más fuertes en el Señor que otros, que son más débiles, pero todos necesitan de nuestra oración. Es el tiempo que hagamos como dice la palabra de Dios en: 1 Tesalonicenses 5:11: Por lo cual, animaos unos a otros, y edificaos unos a otros, así como lo hacéis. Hermanos vivimos tiempos difíciles, donde el enemigo de nuestras almas no duerme y quiere apartarnos de la verdad que es Jesús, por eso debemos rogar a Dios por el pueblo de Dios en nuestras oraciones, como nos dice Epafras, para que estén firmes, perfectos y completos en todo lo que Dios quiere. Y como nos dice: Hebreos 3:12 y 13: Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo; antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado.
Por eso hermanos, si tú conoces al Señor y has recibido Su palabra y Su amor, Él quiere que nos amemos unos a otros como nos dice: 1 Pedro 1:22: Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro. Por eso es importante y necesario interceder por cada hermano en Cristo, porque somos un mismo cuerpo en Cristo, tal vez tenemos diferentes ideales, pero esos ideales deben tener un mismo fin, agradar a aquel que nos tomó por soldados, a Jesús; por eso si andamos en el mismo evangelio, el cual predicamos, ese mismo amor de Dios nos hace orar unos por los otros con amor fraternal como nos dice: 1 Juan 3:16 En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.
Hermano si estás enfermo, si estas necesitado, si estas pasando por problemas, si te sientes débil, desanimado, desconsolado, apartado de Dios déjame orar por ti en el amor del Señor, lo hacemos no esperando nada a cambio sino lo que Jesús hizo en mi lo haga en ti, el quiere levantarte, quiere restaurarte, quiere bendecirte, quiere sanarte, quiere darte lo que no has podido encontrar en el mundo o en otros medio donde has buscado, porque no lo dejas actuar en tu vida. Pero sabe una cosa aunque tal vez no quieras que oremos por ti, siempre habrá un hermano que está intercediendo por ti, hasta que Dios haga la obra en ti. La palabra de Dios nos dice en Santiago 5:16: Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho. El Señor quiere que seamos sanados interiormente que no existan diferencias entre el pueblo de Dios, intercedamos unos por los otros y seremos una iglesia que como cadena firme y sujeta en la roca que es Cristo es difícil de romper.
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
Templo Cristiano Eben-ezerebenezertemplocristiano2009@gmail.com
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