martes, mayo 26, 2015

MUJER INTERCEDE





Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas,
oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres;
porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador,
1 Timoteo 2: 1,3

Posiblemente ALGUNOS  hemos tenido la necesidad de que alguien hable a favor nuestro y nos ayude a salir “bien librados” de alguna situación ya sea personal, familiar, laborar, escolar, etc., y a esto se le llama interceder; sin embargo hablando de intercesión espiritual seguramente TODOS nos hemos visto en la necesidad de que alguien nos apoye y es muy probable que haya sido una mujer la que oró a Dios para clamar por nosotros.

En la Palabra de Dios, podemos leer sobre hombres que intercedieron por el pueblo ante Dios, tal es el caso de Moisés, Abraham y Daniel; pero también encontramos mujeres que fueron grandes intercesoras como Débora, Rut y Ester; sin embargo llama mi atención la historia de Abigaíl, ella intercedió ante David por su esposo Nabal que de acuerdo a lo que dice la Biblia  el hombre era duro y de malas obras 1 Samuel 25:3, y lo interesante  de esta historia (ver 1 Samuel 25: 1-44) es que hoy en día esta porción de la Palabra seguimos viviéndola en diversos hogares pues seguramente como esposas hemos tenido  la necesidad de interceder por nuestros esposos y que tal vez como Nabal, no han sido temerosos de Dios y por quienes ha sido preciso clamar a Dios para que Él obre de una manera excepcional, confiando plenamente en que … nada hay imposible para Dios Lucas 1: 37

Aunque la Palabra de Dios dice en 1 Timoteo 2:5 Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, también nos encontramos instrucciones sobre la oración Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador,  1 Timoteo 2: 1,3.

La historia de Nabal, de acuerdo a la perfecta voluntad de Dios concluyó con su muerte Jehová hirió a Nabal, y murió. 1 Samuel 25:38; y tal vez en tu hogar tengas un esposo como Nabal, por el cual debas interceder,  pero que le es necesario morir a su viejo yo como dice en Colosenses 3: 5,10 Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros, y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno;  así que hoy te invito a que seas como Abigail que supo hacer lo correcto, que fue sabia, valiente y decidida, y que seamos mujeres que interceden, confiando siempre en que  “… todo lo que pidieras orando, creed que lo recibiréis y os vendrá”. Marcos 11:24



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