UNA IGLESIA QUE TRABAJA

Así que,  hermanos míos amados,  estad firmes y constantes,  creciendo en la obra del Señor siempre,  sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano. 1 Corintios 15:58 

Hace algunos años una amiga estaba pasando por una situación complicada y Dios me dio la bendición de poder compartir con ella diariamente un versículo de la Palabra de Dios y sé que esto era como un aliciente que le hacía saber que Dios estaba con ella.  Al cabo de unas semanas nuestro Pastor me comentó que aprovechando que muchos de los miembros de nuestra congregación tenían correo electrónico quería que compartiéramos, por este medio, un poco de la Palabra de Dios, le explique lo que estaba haciendo con mi amiga y le pareció que también podíamos compartirlo con la congregación. 

¡Así empezó Maná para Eben-ezer! Siendo solo para nuestros miembros y algunos amigos de nuestros miembros; poco a poco se fue compartiendo con otras personas. Al cabo de un tiempo, una de nuestras hermanas dijo que quería apoyar, después viendo que esto del Maná iba creciendo se vio como opción que cada versículo que compartíamos podíamos incluirle una breve enseñanza, esto nos llevó a crear el blog; después para que no fuera carga solo para nuestro Pastor, se organizó un equipo de colaboradores para que nos apoyaran con las enseñanzas y así poco a poco esto que había comenzado para ayudar a una persona se convirtió en un pequeño ministerio que sabemos que para honra y gloria de Dios ha sido de gran bendición para quienes nos leen en varias partes del mundo.

Maná para Eben-ezer, también ha hecho que algunos hermanos descubran ese talento que tenían escondido, ya sea a través de escribir algunas líneas, o por medio del diseño y manejo del blog,  pero sobre todo nos ha hecho trabajar juntos como iglesia en una de las ordenanzas que Dios nos da y que es  “…Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” Mar 16:15; quizás por nuestras diferentes actividades no nos es posible salir a predicar y menos lejos de nuestros hogares, pero a través de la tecnología hemos podido ponerlo en práctica para honra y gloria de Dios.

No sé si todos nuestros colaboradores han dimensionado el alcance de este ministerio pero de lo que si estoy segura es que como les escribió Pablo a la iglesia de Corinto:   …hermanos míos amados,  estad firmes y constantes,  creciendo en la obra del Señor siempre,  sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano. 1 Co 15:58. 

Y concluyo con esto, un día una persona me presentó con su grupo de amistades, e hizo referencia del lugar en donde me congrego diciendo que era una “iglesia chiquita” en una colonia popular; hoy para la honra y gloria de Dios puedo decir bien segura que, esa “iglesia chiquita” donde me congrego es una iglesia que trabaja en conjunto para compartir el evangelio a muchas personas.

Saludos cordiales, bendiciones

Maná para Eben-ezer

Templo Cristiano Eben-ezerebenezertemplocristiano2009@gmail.com

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