Con solo esta pequeña parte de la vida del profeta Elías nos podemos dar cuenta que Dios es un Dios de Provisión, un Dios comprometido con sus hijos pero sobre todo que ÉL prepara las bendiciones en los momentos justos, que maravilloso es recibir de Su propia mano el sustento que necesitamos “17:4 Beberás del arroyo; y yo he mandado a los cuervos que te den allí de comer. 17:5 Y él fue e hizo conforme a la palabra de Jehová” cuanta seguridad es escuchar que Él ya ha dado ordenes para sustentarnos en medio de la sequía, y es que a veces las bendiciones llegan de maneras inesperadas y sorpresivas, así como Dios usó a los cuervos Dios usará cualquier persona, situación o medio para dejarnos ver Su mano poderosa actuar; Dios ya había determinado una larga sequía y al secarse el arroyo donde bebía Dios mandó que Elías se moviera de aquel arroyo, “Vino luego a él palabra de Jehová, diciendo: Levántate, vete a Sarepta de Sidón, y mora allí; he aquí yo he dado orden allí a una mujer viuda que te sustente.” me preguntó cuantas dudas sentiría pues hasta ese momento recibía de la propia mano de Dios el sustento pero qué pasaría por su mente cuando Dios le mandó moverse? Por qué con aquella viuda??, cómo una viuda podría sustentarlo¿?? Pero si había visto la mano de Dios ordenándole a los mismos cuervos que le dieran de comer nuevamente Elías caminó por FE solo creyendo en que Dios proveería, con la clara convicción de que Dios JAMÁS abandona a los que le aman y sin cuestionarle accedió, después de todo Dios había dicho que ya había preparado provisión para él y como desconfiar de Dios sabiendo de Su Poder y Grandeza, Elías se topó con un panorama poco alentador y es que la viuda la parecer no tenía NADA que ofrecerle; y entonces Dios lo había engañado ?? Se estaría burlando de él, y la respuesta es clara NO Dios jamás miente, él siguió confiando en Dios aún viendo que en ese lugar era imposible ser sustentado pero maravillosamente Dios movió Su mano una vez más “17:14 Porque Jehová Dios de Israel ha dicho así: La harina de la tinaja no escaseará, ni el aceite de la vasija disminuirá, hasta el día en que Jehová haga llover sobre la faz de la tierra.” Si tú estas pasando un momento de sequía, quizá por momentos has visto Su provisión, tal vez ha pasado tanto tiempo que ya no sabes qué más hará Dios pero hoy es momento de recordar SU PROMESA Y PROVISIÓN “no he visto justo desamparo ni su descendencia que mendigue pan” es momento de recordar que aunque pases por un momento de escases Su provisión no cesará hasta el día que Él mismo haga descender la lluvia de bendición sobre ti y los que amas, es momento de aferrarte a Su provisión porque pasando la sequía vendrá la lluvia de bendición que tanto has esperado. Aleluya!!!
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
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