¿QUE HARÉ FRENTE A UNA CRISIS?

Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia,
para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.
Hebreos 4:16

Cuando un niño tiene un problema o un deseo muy grande, por lo general corre hacia donde sus padres y pide ayuda, a veces hasta con llanto y con la insistencia más grande del mundo hasta conseguir lo que necesita en cuestión, así pienso de este  versículo en  Hebreos 4:16 que dice: "Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro" dice que nos acerquemos con confianza, nuestro Padre Celestial se agrada de que le tengamos confianza, pues sin fe es imposible agradar a Dios (Hebreos 11:6), y también nos exhorta Santiago 1:6 "Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra."

Muchas veces nuestro propio pecado,  la duda, el temor, el sentirnos inmerecedores hace que nos alejemos de ese trono de la gracia, al que se accede por medio de la oración,  pero es en esos momentos donde más necesitamos allegarnos a Dios y clamar por misericordia, recordemos que Dios sabe que somos débiles,  y si aun hay aliento aun hay oportunidad para nosotros,  mismo Hebreos nos dice " Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado."

Ya estando delante de Dios, con la confianza puesta en Dios, en su amor, en su fidelidad, Dios ha prometido derramar su misericordia sobre nosotros, y ayuda oportuna, que gran bendición, saber que no estamos solos, no estamos a la deriva, sus promesas son fieles y verdaderas.

Si estamos  pasando por una crisis o  si  hay  un anhelo tan grande que nuestras fuerzas no puedan alcanzar, hagamos de " Dios nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones." Salmo 46:1

Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes. 1a Pedro 5:7

Claman los justos, y Jehová oye,

Y los libra de todas sus angustias.

Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón;

Y salva a los contritos de espíritu.

Muchas son las aflicciones del justo,

Pero de todas ellas le librará Jehová.

El guarda todos sus huesos;

Ni uno de ellos será quebrantado. 

Salmo 34:17-20

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