¿Cómo
aplicaría la Iglesia la Misericordia de Dios?
En esto hemos conocido el amor, en que
él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por
los hermanos. Pero
el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad y cierra
contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él? Hijitos míos, no amemos
de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad (1 Juan 3:16-17).
Dentro de cada congregación existen personas o
familias que pasan o han pasado alguna necesidad, y como iglesia debimos haber
apoyado, pero nunca nos dimos cuenta o lo pasamos por alto; ya sea porque no
tenemos esa práctica o no hay amor y misericordia hacia los demás. La iglesia primitiva tenía una
visión, la cual debemos tener hoy, porque el evangelio es el mismo; la iglesia compartía
el pan en los hogares, me imagino que los apóstoles iban a visitar a los
hermanos en necesidad, llevando despensas y compartiendo el pan, lo hacían con
alegría y sencillez de corazón, dice la biblia en Hechos 2:46 Y
perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas,
comían juntos con alegría y sencillez de corazón.
Otro pasaje de como la iglesia compartía para la expansión del evangelio, en 2 Corintios
8, nos dice el apóstol Pablo: Asimismo, hermanos, os
hacemos saber la gracia de Dios que se ha dado a las iglesias de Macedonia; que
en grande prueba de tribulación, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza
abundaron en riquezas de su generosidad. Pues doy testimonio de que con agrado
han dado conforme a sus fuerzas, y aún más allá de sus fuerzas.
Recuerdo que una ocasión escuché a un
Pastor decir: Hermanos, la iglesia está para ayudar al que pasa necesidad;
entonces, ¿porque se nos hace dolor apoyar con recursos, con trabajo, con
visitar a los enfermos, con visitar a los hogares, con ayudar a las viudas, con
ayudar a los misioneros, en compartir con despensas, etc.? Hermanos
no todo es dinero, tengamos misericordia y oremos por las personas, no podemos
pasar desapercibido la necesidad del prójimo, seamos el buen samaritano que
necesita el enfermo, el desvalido, el drogadicto, el alcohólico, el maltratado,
etc. Dice la biblia, para eso nos ha enviado el Señor, a estos doce envió Jesús,
diciendo: Id a las ovejas perdidas de la casa de Israel. Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha
acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos,
resucitad muertos, echad fuera demonios: de gracia recibisteis, dad de gracia
Mateo 10:6-7.
Te dice Jesús: Porque tuve hambre y me disteis de
comer; tuve sed y me disteis de beber; fui forastero y me recogisteis; estuve
desnudo y me vestisteis; enfermo y me visitasteis; en la cárcel y fuisteis a
verme. Respondiendo el Rey, les dirá: “De cierto os digo que en cuanto lo
hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis”. Mateo
25:34-40.
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Templo Cristiano Eben-ezer
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