Poned la mira en las cosas de
arriba, no en las de la tierra. Colosenses 3:2
El apóstol Pablo escribe a los colosenses la vida a la
que ahora somos llamados a vivir; en plenitud con Cristo. En el texto que tomamos se nos indica que
para estar en ésta plenitud con Él, debemos poner nuestra mirada en el
cielo y no en la tierra. Para muchos aunque no lo comprendan o no se los enseñe
una lección acerca del tema, obedecen la Palabra sin ningún cuestionamiento,
pero para quien tiene un apego a lo que el mundo ofrece, es necesario
enseñarles, redargüir y hasta llegar al
exhorto, para que pongan su mirada en las cosas del cielo y no en las de la
tierra.
Existe un
contraste y necesitamos poner en una
balanza y mirar que es lo que más nos
conviene; solo recuerda que cualquier decisión que tomes pagarás un precio, o
serás recompensado según tú lo decidas.
Lo que es del cielo es eterno y lo que es de la tierra
(mundo) es temporal, éste último en
cualquier momento puede cambiar, puede sufrir un daño (ladrones minan y hurtan
Mateo 6:19) no así lo que está en el
cielo (1 Pedro 1:4) una herencia
incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para
vosotros.
El valor que tiene tu alma según Cristo: Porque ¿qué
aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? Mateo16:26; y
para el mundo solo vales dependiendo de lo que tienes.
Podemos resumir que por mucho que el mundo te ofrezca;
lo que Dios nos ha dado es mucho más y mucho mejor. Romanos 8:17 Y si hijos,
también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que
padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados.
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
Templo Cristiano Eben-ezer
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