Padre
de misericordias y Dios de toda consolación,
el cual nos consuela en todas nuestras
tribulaciones,
para que podamos también nosotros consolar a
los que están en cualquier tribulación,
por medio de la consolación con que nosotros
somos consolados por Dios.
2 Corintios 1:3, 4
En mi andar en el Señor he sido bendecida en gran
manera, sin embargo también he tenido que atravesar por situaciones adversas,
esto es normal y seguramente a todos nos ha
pasado, pues la Palabra de Dios dice: En el mundo tendréis aflicción;
pero confiad, yo he vencido al
mundo Juan 16:33b; Dios en su infinita misericordia a través de estas
“aflicciones” me ha hecho madurar y subir cada vez, un escalón más en mi área
espiritual, es decir que las adversidades me han permitido crecer, pues en
medio de estas, he tenido que refugiarme en el único lugar seguro, bajo el
cobijo de nuestro amoroso Padre Celestial.
Y es
justamente que a través de las diversas tribulaciones en donde podemos
encontrar el consuelo de Dios, pues es
cuando nos esforzamos mas en buscarlo por medio de la oración, el ayuno, la
lectura de Su Palabra y por consecuencia nuestra fe aumenta o se fortalece, y
en 1 Tesalonicenses 3: 7 dice: … en medio
de todas nuestras dificultades y aflicciones, hemos recibido mucho consuelo al
saber que ustedes siguen firmes en su fe. ¡y así es! Pero lo más
interesante es que cuando hemos tenido la maravillosa bendición de haber
experimentado el amor consolador del Señor, entonces el Espíritu Santo
redarguye en nuestras vidas para que podamos ser conmovidos cuando alguien
necesita ser consolado, brindándole nuestro apoyo, pues la Palabra de Dios dice
que (Dios) nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a
los que están en cualquier tribulación,
por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios.
2 Corintios 1:4, y si verdaderamente hemos experimentado el amor consolador
de nuestro Dios, tenemos el compromiso y tal vez hasta el deber moral de compartir con quien esté necesitando,
palabras de consuelo, sabiendo que Dios nos dará la gracia y sabiduría para
hacerlo dirigidos a través el Espíritu Santo y poder ser de ayuda en ese
momento de aflicción de nuestro prójimo.
Maná para Eben-ezer
Templo Cristiano Eben-ezerebenezertemplocristiano2009@gmail.com
http://mana-ebenezer.blogspot.com/
Búscanos y síguenos en Facebook
http://www.facebook.com/mana.ebenezer
Búscanos y síguenos en Facebook
http://www.facebook.com/mana.ebenezer
0 comentarios:
Publicar un comentario