El hombre del relato se llamaba Jairo era líder en la sinagoga, muchos lideres religiosos no creían que Jesús era el hijo de Dios. Pero Jairo era diferente, tenía algo que se llama FE “Hebreos 11:1. Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve” y lo deja ver en esta petición para que su hija se sane, cuánta fe en sus palabras, sin duda alguna sabía muy bien lo que pedía, y también sabía a quién recurría, en esta oración se dejan ver un par de cosas, una de ellas es que la hija de Jairo estaba muy, muy enferma, agonizando para ser exactos, probablemente sabía que no había más que hacer; y la segunda y más importante es que Jairo creía que con un toque del Maestro podía ser sanada pese a la gravedad o avanzado de su enfermedad, él sabía muy bien que las circunstancias no eran importantes, que acudía a Aquél que era poderoso para sanar, para salvar, para librar.
Quizá había escuchado de los muchos milagros, tal vez lo vio desde lejos pero ese día él necesitaba abrazar un milagro para su hija, quizá hoy nos toca ser como ese Jairo, presentarnos delante de Dios, creerle, tener la certeza de quién es Dios, de lo que es capaz, movernos en Fe no solo para nuestro propio beneficio sino por nuestra familia, por los que queremos, pero pidiendo con FE, él mostró una fe muy grande al decirle a Jesús que Él podía sanar a su hija si iba a su casa y le tocaba, él realmente creía;. No dijo, “ojala que puedas” ni dijo “esperó que si lo intentas,” Jairo tenía completa fe en Jesús y consiguió ese toque para su hija “Si puedes creer, al que cree todo le es posible" Marcos 9:23, no dejes que las circunstancias te digan lo contrario, aún cuando fueron avisados que la hija de Jairo había muerto aún en ese momento Jesús le dijo “no temas cree solamente” todo podrá gritarte que ya no hay nada que hacer pero para Dios no hay imposibles "Lo que es imposible para los hombres, es posible para Dios", hay algo en la Fe que activa la mano de Dios.
Éste es el tiempo de CREER, de activar con FE el Poder de Dios en cada situación, en cada circunstancias, en cada enfermedad, cuánto más grande sea, cuánto mas imposible parezca es una oportunidad para ver la grandeza del poder de Dios, no dejes que se escapen los toques poderosos del Maestro hoy es tiempo de interceder diciendo “ven y pon las manos mi Señor posa Tu mano poderosa y ésta enfermedad se irá en Tu nombre”, y vea la grandeza de Dios sobre esa enfermedad, esa sanidad se alcanza por medio de la FE, este es el día de Sanidad solamente CREE en Él.
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
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