Gozaos con los que se gozan;
llorad con los que lloran.
Unánimes entre vosotros…
Romanos 12:15-16
Hace
unos meses, en mi familia, atravesamos por tiempos sumamente complicados, la
salud de uno de nuestros miembros era muy delicada, el diagnóstico no era
alentador y solo esperábamos un milagro por parte de Dios, entonces solicitamos
a nuestra familia en Cristo su apoyo en oración y fue maravillosa la respuesta
que hubo entre nuestros hermanos, incluso en un día “previo, durante y
posterior” a una cirugía se convocó a una cadena de oración y pudimos ver la
mano de Dios obrando no solo en esa situación sino en la unidad de nuestra
Iglesia.
Y
esta experiencia personal me hace meditar en lo que escribió el Apóstol Pablo a
los romanos: Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no
todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, siendo muchos,
somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros. Romanos
12:4-5
La
adversidad que como familia pasamos, no solo fue parte de nosotros, sino de
nuestra familia en Cristo, y fue a través de un llamado a la oración que nos
unimos para apoyarnos no solo orando, sino dando palabras de aliento,
visitándonos, etc. Sin lugar a dudas atendiendo la exhortación hecha a los
romanos pero que también hicimos nuestra: Gozaos con los que se gozan; llorad con los
que lloran. Unánimes entre vosotros… Romanos 12:15-16
Hoy
te invito a que en todo tiempo podamos demostrar nuestra unidad y que con ello
podamos dar testimonio de lo que Cristo ha hecho en nuestras vidas y declarar
como el salmista: ¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en
armonía! Salmos 133:1
Queremos
orar por ti
Templo
Cristiano Eben-ezer
Saludos
cordiales, bendiciones
Maná
para Eben-ezer
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