martes, noviembre 26, 2013

COMPROMETETE CON DIOS



Un hacedor es una persona que ejecuta alguna determinada cosa. La palabra “hacedor” se relaciona directamente con Dios, reconociéndolo como el Creador y Formador de este mundo.

Las Sagradas Escrituras nos exhortan a que no tan solo escuchemos y/o leamos lo que en ellas se establece, sino que nos insta a poner en práctica cada uno de los consejos e instrucciones que nos da.
Al creer nosotros que la Biblia es la Palabra de Dios; que es la misma voz de Dios hablando a nuestra vida, debemos tomarla muy en serio y comprometernos a aplicarla a nuestra vida diaria.

Un compromiso es una obligación contraída mayormente por voluntad propia, de tal manera que siendo nosotros hijos de Dios, lavados con la sangre de Cristo, es nuestra obligación  y deber voluntario el obedecer y vivir de acuerdo a lo que establece la Biblia.

Entre un “hacedor” y un “oidor” hay una gran diferencia. “el hacedor” es el que pone en práctica lo que cree y dice y lo demuestra además con sus palabras y acciones, mientras que “el oidor” es el que escucha una verdad, quizás la cree pero no del todo, de manera que no la aplica a su vida. Como dicen comúnmente “le entra por un oído y le sale por el otro”

Dios nos manda a que seamos hacedores de Su Palabra, nos manda creer en cada una de las palabras y promesas que tiene para nosotros. Demanda nuestra obediencia y un compromiso fiel de vivir de acuerdo a lo que Él manda. Nos dio una voluntad propia pero quiere que esa voluntad la sometamos a Él, de manera que vivamos no conforme a la nuestra sino a la perfecta voluntad de Él descrita en las Sagradas Escrituras.

Si tú crees de corazón lo que dice la Biblia, comprométete con Dios a vivir de acuerdo a ella, no solo digas algunos cuantos versículos o digas conocerla, pero tu vida demuestre lo contrario, porque de ser así vendrás a ser una persona estéril y vacía.

La Biblia es nuestro manual de instrucciones divino, Dios nos habla y nos ha hablado por medio de ella, hagamos un compromiso con Dios de leerla, de escudriñarla pero sobre todo ponerla en práctica en nuestra vida, para que conozcamos más a nuestro Dios y Padre y así demos testimonio de que somos sus hijos.

Saludos cordiales, bendiciones

Maná para Eben-ezer

Templo Cristiano Eben-ezer
ebenezertemplocristiano2009@gmail.com

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