Cuán importante es tener un líder y un ejemplo a seguir en casa, alguien que tenga autoridad no sólo moral sino espiritual, alguien a quien podamos recurrir cuando estamos tristes o angustiados y poder recibir un consejo de lo alto por medio de esa persona.
Versículos anteriores Dios había hablado a Jacob para que edificase un altar, pero le dijo a él mismo, no incluyó a la familia de Jacob. No le dijo que subiera junto con su familia para ofrecer sacrificio ni holocausto. Sin embargo, un buen líder que se preocupa por los suyos, por el bienestar de los suyos, procurará hacer conocer al verdadero Dios a su familia, a sus cercanos, a su casa. Jacob le dijo no sólo a su familia sino a todos los que con él estaban, a sus siervos, sus criados, etc. Quería ofrecer un sacrificio puro, santo y agradable delante de Dios y eso incluía a todos los que le rodeaban. Lo maravilloso de esto es que hicieron caso, atendieron a la voz de Jacob y se despojaron de los dioses ajenos y del pecado.
Un buen líder deja un legado espiritual a sus hijos, a su casa, a su familia. Oremos para que Dios levante esos líderes en nuestras casas y podamos estar confiados en que Dios bendecirá simplemente por el hecho de que hay alguien que hace brecha y vallado por nosotros.
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
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Templo Cristiano Eben-ezer
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