La persona puede ser feliz ejerciendo todo aquello que le gusta hacer. El carpintero dando forma a la madera . El arquitecto, diseñando. El ingeniero construyendo. El campesino sembrando.
El vendedor en sus ventas. Cada uno si lo hace con pasión a su especialidad puede sentirse feliz y satisfecho con su labor aunque otros no lo valoren.
Incluso quienes tienen dinero abundante, pueden sentirse felices por las facilidades que el poder económico les permite, como los lujos, gustos personales, bienes materiales, inversiones, eso y más produce en ellos satisfacción personal.
Pero para aquellos que creen en Dios, aunque se sientan a gusto con su trabajo y felices con lo que poseen o con lo que no tienen, piensan en el bien de la familia como algo muy sagrado, no solo para satisfacer sus necesidades básicas, que eso todo lo hacen, como por instinto,
aunque hay sus excepciones. Pero hay una necesidad espiritual que también debe de ser saciada en la familia de cada uno.
Solo que esa cuesta oración, consejería bíblica, estar muy cerca de ellos en todos sus momentos, ser buenos ejemplos de valores, y de buenos cristianos.
Y verles crecer hasta que por sí mismos busquen a Dios con todo su corazón.
Ver una familia así es el mayor gozo que podemos tener como padres.
Velemos por la familia y más en estos tiempos tan difíciles.
Si quieres que tu familia sea feliz. Asegúrate de que andan en la verdad.
El vendedor en sus ventas. Cada uno si lo hace con pasión a su especialidad puede sentirse feliz y satisfecho con su labor aunque otros no lo valoren.
Incluso quienes tienen dinero abundante, pueden sentirse felices por las facilidades que el poder económico les permite, como los lujos, gustos personales, bienes materiales, inversiones, eso y más produce en ellos satisfacción personal.
Pero para aquellos que creen en Dios, aunque se sientan a gusto con su trabajo y felices con lo que poseen o con lo que no tienen, piensan en el bien de la familia como algo muy sagrado, no solo para satisfacer sus necesidades básicas, que eso todo lo hacen, como por instinto,
aunque hay sus excepciones. Pero hay una necesidad espiritual que también debe de ser saciada en la familia de cada uno.
Solo que esa cuesta oración, consejería bíblica, estar muy cerca de ellos en todos sus momentos, ser buenos ejemplos de valores, y de buenos cristianos.
Y verles crecer hasta que por sí mismos busquen a Dios con todo su corazón.
Ver una familia así es el mayor gozo que podemos tener como padres.
Velemos por la familia y más en estos tiempos tan difíciles.
Si quieres que tu familia sea feliz. Asegúrate de que andan en la verdad.
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
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