jueves, noviembre 28, 2019

FE PARA RECIBIR ECONOMÍA SALUDABLE



Asimismo, a todo hombre a quien Dios da riquezas y bienes,
y le da también facultad para que coma de ellas,
y tome su parte, y goce de su trabajo, esto es don de Dios
Eclesiastés 5:19

La economía saludable es un término que hace referencia a la prosperidad y optimización de los recursos. A través de una buena organización, cambio de hábitos, uso de herramientas adecuadas y aprovechamiento de oportunidades.

La Fe es accionar, y por Fe creemos que de Dios recibimos todos los bienes que adquirimos.
El Señor te concederá abundancia de bienes: multiplicará tus hijos, tu ganado y tus cosechas en la tierra que a tus antepasados juró que te daría. El Señor abrirá los cielos, su generoso tesoro, para derramar a su debido tiempo la lluvia sobre la tierra, y para bendecir todo el trabajo de tus manos. Deuteronomio 28:11-12.
Recuerda al Señor tu Dios, porque es él quien te da el poder para producir esa riqueza; así ha confirmado hoy el pacto que bajo juramento hizo con tus antepasados. Deuteronomio 8:18.
La bendición del SEÑOR es la que enriquece, y El no añade tristeza con ella. Proverbios 10:22.

De las bendiciones que recibimos de Dios, debemos tener sabiduría para ser buenos administradores y tener una economía saludable. «Riquezas y perfumes hay en la casa del sabio; en la casa del necio sólo hay despilfarro» Proverbios 21:20.

En la Biblia encontramos la historia de las vacas gordas y las vacas flacas. La cual nos enseña que aun en la escasez, hubo abundancia por la buena administración. Debemos entender que no debemos malgastar, derrochar o adquirir cosas innecesarias, sino ser buenos administradores con los bienes que Dios nos da, para cuando llegan los tiempos de crisis, tener una reserva de bienes y poder subsistir hasta que vuelvan los tiempos de estabilidad. Yo fui joven, y ya soy viejo, y no he visto al justo desamparado, ni a su descendencia mendigando pan. Salmos 37:25.

De Dios recibiremos lo necesario para vivir, y Él también nos dará en abundancia, cuando Él lo considere. Asimismo, a todo hombre a quien Dios da riquezas y bienes, y le da también facultad para que coma de ellas, y tome su parte, y goce de su trabajo, esto es don de Dios. Eclesiastés 5:19.

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Templo Cristiano Eben-ezer

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