…En tiempo aceptable te he oído,
y en día de salvación te he socorrido.
Ahora es el tiempo aceptable;
ahora es el día de
salvación
2 Corintios 6:2
Durante
años, le hablé a mi primo lejano sobre su necesidad de un Salvador. Hace poco,
cuando vino a visitarme y volví a invitarlo a recibir a Cristo, respondió de
inmediato: «Me gustaría aceptar a Cristo y unirme a una iglesia, pero todavía
no. Vivo entre personas con otras creencias. A menos que me mude, no podré
practicar bien mi fe». La persecución, el ridículo y la presión de sus pares
fueron las excusas para posponer su decisión.
Sus
temores eran legítimos, pero le aseguré que, pasara lo que pasara, Dios no lo
abandonaría. Lo insté a no postergarlo más y a confiar en la protección del
Señor. Entonces, dejó de lado sus excusas, reconoció su necesidad del perdón
divino y confió en Cristo como su Salvador personal.
Cuando
Jesús invitaba a personas para que lo siguieran, estas también ponían excusas;
todas relacionadas con intereses de este mundo (Lucas 9:59-62). La respuesta
del Señor nos exhorta a no permitir que las excusas nos priven de
lo más importante en la vida: la salvación de nuestra alma.
¿Oyes
el llamado de Dios para que aceptes la salvación que te ofrece? No lo
pospongas. «He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de
salvación» (2 Corintios 6:2).(*)
(*) Tomado de Nuestro Pan Diario
Queremos
orar por ti
Templo
Cristiano Eben-ezer
Saludos
cordiales, bendiciones
Maná
para Eben-ezer
Búscanos
y síguenos en Facebook
No hay comentarios:
Publicar un comentario