Dios es nuestro amparo y fortaleza,
nuestro pronto auxilio en las tribulaciones
Salmo 46:1
He aquí un mensaje de fe para todo aquel que en ciertas etapas
difíciles de la vida se le agotan las fuerzas, los recursos, las esperanzas y
hasta las ganas de seguir luchando o viviendo; momentos de debilidad física,
financiera, moral y espiritual; días de soledad y tristeza, en los que
pareciera que ni Dios se acuerda de nosotros. ¡Pero no se equivoque! Dios siempre
está dispuesto a extender Su mano para velar por nuestro bien, solo basta que
en nuestro corazón exista la convicción de que Él es Dios y tiene el control perfecto
de todo lo que nos pasa, aunque no lo entendamos de momento; solo basta que nos
dejemos guiar por Su voluntad y esperemos lo que Él hará en nuestras vidas. La
Biblia dice que todas las cosas les ayudan a
bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. Romanos 8:28
Hermanos y amigos, para esos días de debilidad, vayamos a Dios
en oración, y confesemos cual salmista desde el corazón: Dios, tu eres mi amparo
y fortaleza, mi pronto auxilio en las tribulaciones. Oremos con fe y convicción
y dejemos que Dios haga Su voluntad en nosotros.
Queremos
orar por ti
Templo
Cristiano Eben-ezer
Saludos
cordiales, bendiciones
Maná
para Eben-ezer
Búscanos
y síguenos en Facebook
No hay comentarios:
Publicar un comentario