lunes, septiembre 07, 2015

CRISTO LIBERTA A LOS ENFERMOS



CRISTO LIBERTA A LOS ENFERMOS
Y saliendo Jesús, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, y sanó a los que de ellos estaban enfermos. Mateo 14:14

¿Cuál es tu enfermedad? ¿Cuál es tu problema de salud? Hoy en día vemos muchos tipos de enfermedades, la ciencia descubre muchos remedios o soluciones a las enfermedades, pero son más las enfermedades que surgen como nuevas en las cuales no hay remedio. La biblia dice: Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos. Hebreos 13:8.

Cristo  vino para salvarnos y para libertarnos de todas nuestras enfermedades, no importando cuan antigua o nueva sea tu enfermedad. Y recorrió Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo. Mateo 4:23. Sabiendo esto Jesús, se apartó de allí; y le siguió mucha gente, y sanaba a todos, Mateo 12:15

Dios envió a su hijo Jesucristo a sanarnos de todo tipo de enfermedad, tanto  física como espiritual. El Espíritu del Señor está sobre mí,  por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos; Lucas 4:18. Entonces fue traído a él un endemoniado, ciego y mudo; y le sanó, de tal manera que el ciego y mudo veía y hablaba. Mateo 12:22. Cómo Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret, y cómo éste anduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él. Hechos 10:38
Cristo tiene el poder y la autoridad para sanarte, pero tienes que ir  a sus pies y creer a su palabra para ser sanado. Y se le acercó mucha gente que traía consigo a cojos, ciegos, mudos, mancos, y otros muchos enfermos; y los pusieron a los pies de Jesús, y los sanó... Mateo 15:30. Respondió el centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; solamente di la palabra, y mi criado sanará. Mateo 8:8

Si hay algo que nos incomoda es el estar enfermos, física, espiritual y emocionalmente. El no poder valernos por nosotros mismos, estar dependiendo de otros. Pero recuerda, Cristo es la respuesta a cualquier enfermedad. Solamente acércate a Él, cree y no dudes. Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible. E inmediatamente el padre del muchacho clamó y dijo: Creo; ayuda mi incredulidad. Marcos 9:23,24.

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