ES TIEMPO DE INTERCEDER POR SANIDAD

En los tiempos que vivimos se ha desarrollado mucho la medicina, actualmente conocemos infinidad de enfermedades que atacan al ser humano y que han sido descubiertas por la ciencia médica. Pero sabemos que para muchas de ellas aun no se ha descubierto el medicamento que la extermine, sino solamente para controlarlas. Pero déjame decirte amigo y hermano, que conocemos el remedio eficaz para toda enfermedad curable o incurable, ese remedio es Jesús el hijo de Dios, el cual ya experimente y que ha sido eficaz para mi vida, Jesús es mi médico por excelencia y te lo presento. Dios quiere sanarte a ti, ya no sufras más de la enfermedad que te agobia, ven a Jesús; en el evangelio según San Lucas 4:40, nos confirma del poder sanador de Jesús: todos los que tenían enfermos de diversas enfermedades los traían a Él; y Él, poniendo las manos sobre cada uno de ellos, los sanaba. También Jesús vino para sanar y a libertar el corazón del hombre: El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos; A predicar el año agradable del Señor (Lucas 4:18-19). Acepta a Jesús, el es tu Sanador.

Jesús nos dejo una encomienda para todo cristiano lavado con la sangre de Cristo: Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda dolencia. Y les dijo: Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia (Mateo 10:1 y 8). 

Tu y yo somos esos discípulos que el Señor envía a interceder por todos los enfermos, por todos aquellos que sufren por un mal que afecta su cuerpo físico y que ni la ciencia médica encuentra el remedio para ese mal y también por todos aquellos que necesitan sanidad en el alma y en el corazón, donde el pecado ha hecho estragos en sus vidas y han sufrido heridas que ni el mejor Psicólogo puede sanar. Por eso te digo hoy como nos dice el Apóstol Santiago, si tú estás enfermo llama a los ancianos de la Iglesia (Pastor, diáconos, maestros, etc.) y ellos oraran por ti, y la fe te sanara y Dios perdonara tus pecados. Hermano debemos estar preparados en oración, la gente necesita que intercedamos por sanidad; hay mucha gente en hospitales sufriendo alguna enfermedad, en tu familia tal vez hay algún enfermo que necesite de la oración, o un vecino que necesite sanidad. 

Te invito hermano a que intercedamos en el nombre de Jesús por cada persona; proclamemos ayuno y oración en la iglesia para que el Señor envíe sanidad a nuestros hogares, a nuestras iglesias, a nuestras ciudades, Dios nos ha dado poder para orar por los enfermos y ellos sanen. Hagamos lo que nos dice Santiago 5:16: Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho.

Saludos cordiales, bendiciones

Maná para Eben-ezer

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