Muchas veces no nos gustan las autoridades y gobernantes que quedaron a la cabeza de la cuidad o país donde vivimos; quizá no fue por el que votamos o quizá simplemente sus decisiones para la ciudad no parecen las más acertadas; y creemos que no podemos hacer nada; o que no depende de nosotros lo que pase en forma tan general a un pueblo entero o a todo el país; pero estamos equivocados depende mucho de nosotros; esta muy buena parte en las manos del hombre entendido; del hombre que tiene a Dios el buen gobierno de las autoridades; en los proverbios nos hablan de la sabiduría y de lo necesaria que es para los gobernantes, Proverbios 8:15 y16 Por mí reinan los reyes, Y los príncipes determinan justicia. Por mí dominan los príncipes, Y todos los gobernadores juzgan la tierra. También nos ilustra que sucede cuando los que están a la cabeza carecen de sabiduría Proverbios 28:15 y 29:8 León rugiente y oso hambriento Es el príncipe impío sobre el pueblo pobre. Los hombres escarnecedores ponen la ciudad en llamas; Mas los sabios apartan la ira.
Nuestra obligación como cristianos, llenos del entendimiento que nos viene de lo alto es orar por nuestras autoridades para que sea cumplida esta palabra; si están en el poder es porque así les ha sido permitido por Dios, nosotros acatamos esta autoridad y solicitamos que por esta bendición y responsabilidad que les fue otorgada sean llenos de la sabiduría de arriba, por el bien de la población completa, por el bien de los santos que viven en esa ciudad. Tenemos en nuestras manos el poder de cambiar corazones, razones y gobernadores; el poder y autoridad suprema está con nosotros; en Isaías dice El convierte en nada a los poderosos, y a los gobernantes de la tierra hace como cosa vana. Apenas plantados, apenas sembrados, apenas su tallo ha echado raíz en la tierra, él sopla sobre ellos; y se secan. El torbellino los levanta como a la paja. No temamos de lo que pueda pasar por quien sea que este en el poder; Dios está con nosotros y escucha la oración de sus pequeñitos, juez justo y abogado victorioso tenemos para con nosotros; no dejemos de orar por los que reciben la autoridad de la ciudad; porque también fin terrible tendrán si no hacen bien su labor.
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
Templo Cristiano Eben-ezerebenezertemplocristiano2009@gmail.com
http://mana-ebenezer.blogspot.com/
Búscanos y síguenos en Facebook
http://www.facebook.com/mana.ebenezer
Búscanos y síguenos en Facebook
http://www.facebook.com/mana.ebenezer
No hay comentarios:
Publicar un comentario