Abel también presentó al
Señor lo mejor de su rebaño... Y el Señor miró con agrado a Abel y a su ofrenda
(Génesis 4:4)
Afortunadamente
para nosotros nunca le ganaremos a Dios cuando se trata de dar, ÉL siempre va
mucho más allá, realmente al nosotros darle a Él ( y no porque necesite porque
ÈL es el dueño de TODO “Mía es la plata, y mío el oro, dice Jehová de los
ejércitos.” Hag 2:8), es en sí una oportunidad más para ser bendecidos.
Abel llegó con Dios con lo mejor de su ofrenda y Dios vio con agrado esa ofrenda y es que en lo que le damos mostramos sin duda nuestro agradecimiento por lo que hace en nuestras vidas y por lo que Él es para nosotros, después de todo de lo recibido de Su mano damos “de Ti proceden todas las cosas, y de lo recibido de tu mano te damos.”, al tener la seguridad de que Dios ve con agrado nuestro agradecimiento en nuestras ofrendas y en todo aquello que le damos a ÈL sin duda como consecuencia trae mayor bendición a nuestras vidas
Dios en Su palabra nos dejó el secreto “Traed todos los diezmos al alfolí, y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde. Mal 3:10”
Esa es la respuesta de Dios cuando le damos CIELOS ABIERTOS y BENDICIÓN HASTA QUE SOBRE Y ABUNDE, así que “Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre”.
Abel llegó con Dios con lo mejor de su ofrenda y Dios vio con agrado esa ofrenda y es que en lo que le damos mostramos sin duda nuestro agradecimiento por lo que hace en nuestras vidas y por lo que Él es para nosotros, después de todo de lo recibido de Su mano damos “de Ti proceden todas las cosas, y de lo recibido de tu mano te damos.”, al tener la seguridad de que Dios ve con agrado nuestro agradecimiento en nuestras ofrendas y en todo aquello que le damos a ÈL sin duda como consecuencia trae mayor bendición a nuestras vidas
Dios en Su palabra nos dejó el secreto “Traed todos los diezmos al alfolí, y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde. Mal 3:10”
Esa es la respuesta de Dios cuando le damos CIELOS ABIERTOS y BENDICIÓN HASTA QUE SOBRE Y ABUNDE, así que “Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre”.
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
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