Fe es confiar y
entregar tu esperanza a lo invisible, a veces me suena más poético que verosímil,
principalmente cuando estoy pasando en medio de la dificultad o cuando mis
tiempos no son iguales a los de Dios, o más aun cuando lo que quiero es más que
improbable e imposible, entonces es difícil creer y tener fe; Sara vivió esto
en carne propia, siendo de edad muy avanzada y estéril, se le prometió concebir,
es casi de risa, y ella se rió (Génesis 18:12) era una promesa osada, imposible
de hecho, pero no para quien lo prometió. Hebreos 11:11 Por la fe también la
misma Sara, siendo estéril, recibió fuerza para concebir; y dio a luz aun fuera
del tiempo de la edad, porque creyó que era fiel quien lo había prometido.
La
promesa aparte no llego inmediatamente, pero ciertamente llego; muchas veces en
la tardanza de la promesa o de la justicia nuestras fuerzas decaen, en lo
imposible que se vuelven las situaciones y deseos, nuestra realidad se ríe y se
burla de nuestra esperanza, pero hay una clave, Sara la usó... La fe de ella está
en aquel que es fiel, No por en su realidad, ni en sus fuerzas, si no en la
realidad de su Señor. Si tu fe esta puesta en Dios, no decae, sino se fortalece
en su palabra, crece en la oración, abunda en las buenas obras... (Corintios
2:15) para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino
en el poder de Dios.
Cuando tu fe esta
puesta en Dios, es una fe viva, que aunque del tamaño de una semilla de
mostaza, conquista reinos, hace justicia, alcanza promesas, saca fuerzas de
donde no hay, salva la vida; y aunque es puesta a prueba, sale victoriosa, como
el oro pasado por el fuego, mejorada, fina, más preciosa que antes...
Obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas (1a
Pedro 1:9)
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
Templo Cristiano Eben-ezer
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