domingo, agosto 19, 2012

PROMESAS DE LA BIBLIA




Porque para vosotros es la PROMESA, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare.   Hechos 2:39

Las grandes promesas de la Biblia son innumerables, pero no debemos de olvidar que algunas son base doctrinal, así que cree en JESÚS; toma esas promesas como nuestras y para tus hijos:

CRISTO SALVA: Tenemos una promesa de salvación, para todo aquel que acepta a Jesús en su corazón. Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo (Romanos 10:9). Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él (Juan 3:16-17). Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos (Hechos 4:12).

CRISTO SANA: Una promesa es que Jesús es el médico por excelencia, créelo hermano. Mas yo haré venir sanidad para ti, y sanaré tus heridas, dice Jehová (Jeremías 30:17). Él es quien perdona todas tus iniquidades, Él que sana todas tus dolencias (Salmos 103:3); Ciertamente llevó Él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados (Isaías 53:4-5). Y se le acercó mucha gente que traía consigo a cojos, ciegos, mudos, mancos, y otros muchos enfermos; y los pusieron a los pies de Jesús, y los sanó (Mateo 16:30).

CRISTO BAUTIZA: Dios te llenará con su Espíritu Santo, el cual te guiará en tu vida cristiana, créelo es para ti. Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones (Joel 2:28). He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto (Lucas 24:49). Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir (Juan 16:13). Más el consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho (Juan 14:26).

CRISTO VIENE: Jesús nos dará vida eterna, y nos llevará con Él, así lo prometió. Créelo, porque vendrá. He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén (Apocalipsis 1:7). Entonces verán al Hijo del Hombre, que vendrá en las nubes con gran poder y gloria (Marcos 13:26). Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él. Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor (1 Tesalonicenses 4:14-17).

Hermanos y amigos, si permanecemos fieles, esta es la promesa: No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros, para que seáis probados, y tendréis tribulación. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida (Apocalipsis 2:10).

No hay comentarios:

Publicar un comentario