Que hermosa debe ser la alabanza que brotaba de Sus ángeles, y cuán importante debe ser para Dios Su alabanza pues en el momento del nacimiento de Su hijo sus Huestes celestiales estuvieron alabando Su nombre, y dándole la Gloria solo a Él, lo hermoso es que Dios teniendo lo mejor de la alabanza con Sus ángeles acostumbrado a deleitarse con ellos, pone Su mirada en nuestra alabanza llena de defectos, pero agradable a Él cuando derramamos nuestro corazón, a punto de finalizar el año le invito a qué en medio de los problemas, reconocer el papel de Dios en nuestras vidas, dejarle a Él ayudarnos a dejar de pensar en las heridas de nuestros corazones y, en vez de ello, forzarnos a morar en la grandeza de nuestro Dios, David conocía las tribulaciones, enfrentó la amenaza de enemigos, las consecuencias de su propio pecado y los desafíos del dolor, y, sin embargo, también reconoció el poder sanador de la alabanza.
Por esa razón en el que debemos volver nuestra atención a Dios, quien nos colma de beneficios: Nos perdona, nos sana, nos redime, nos corona con amor y compasión, satisface nuestros deseos y nos renueva, recuerda que Dios provee justicia y rectitud, y está lleno de gracia y amor.
Toma a estos ángeles como ejemplo: Alabar la grandeza de Dios pone esperanza en nuestros corazones atribulados, alaba a Dios de todo corazón y verás Su grandeza moverse en tu vida.
Saludos cordiales, bendiciones
Maná para Eben-ezer
Templo Cristiano Eben-ezer
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